El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, aceptó este jueves que su Presidencia será de un solo mandato y prometió una «transición ordenada», después de que el Congreso ratificara la victoria electoral del mandatario electo Joe Biden y que sus partidarios asaltaran el edificio del Capitolio, alentados por los comentarios del mandatario sobre un infundado fraude en las elecciones del 3 de noviembre.
«A pesar de que estoy totalmente en desacuerdo con el resultado de las elecciones y los hechos me confirman, sin embargo, habrá una transición ordenada el 20 de enero», reza el comunicado, publicado por su director de redes sociales, Dan Scavino. La cuenta de Donald Trump en Twitter sigue bloqueada por la red social.
A pesar de la promesa de una «transición ordenada», Trump ha insistido en la idea de un fraude electoral. «Siempre dije que continuaríamos nuestra lucha para asegurarnos que solo los votos legales eran contados».
«Aunque esto representa el final del más grande periodo presidencial en la historia, es solo el principio de nuestra lucha para hacer grande de nuevo a EEUU», continúa el breve texto.
«Grandes patriotas»
Este comunicado viene cuando algunos círculos, incluidas varias figuras republicanas, de la opción de utilizar la 25ª enmienda para ‘apartarlo’ de la presidencia antes de esa fecha, cuando comenzará oficialmente la presidencia del demócrata Joe Biden.
Representa también un ligero cambio de discurso con respecto a sus últimos comunicados, en vídeo y en Twitter, en los que llegaba a afirmar que «esto es lo que pasa» [en referencia al asalto al Capitolio] cuando «una sagrada amplia victoria electoral es viciosamente y sin ceremonia robada a grandes patriotas».
Antes de que se celebrara la sesión para certificar los electores de Biden, en un mitin político frente a la Casa Blanca, Trump afirmó que jamás admitiría su derrota electoral. «No cederemos nunca, nunca concederemos», aseguró a los miles de manifestantes congregados para la marcha bajo el eslogan ‘Salvar EEUU’.
Trump ha pasado los últimos dos meses negándose a conceder la derrota electoral, alimentando teorías conspirativas sobre un presunto fraude electoral que han sido rechazadas en más de una docena de tribunales, incluso con jueces conservadores.
Fuente: El Confidencial
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