La princesa Eugenia, nieta de la reina Isabel II, y esposo, Jack Brooksbank, se convirtieron ayer martes en padres de su primer hijo, cuyo nombre aún no ha sido aún desvelado y que ocupa el undécimo lugar en la línea de sucesión al trono británico.
El niño nació a las 8.55 GMT de la mañana y pesó 8 libras y una onza (3,65 kilos), informó en un comunicado el palacio de Buckingham, residencia oficial de la soberana británica.
Tanto la madre, de 30 años, como el bebé «se encuentran bien», según detalló esa nota.
Eugenia dio a luz al noveno bisnieto de la monarca en el Hospital Portland de Londres, el mismo centro sanitario en el que nació en mayo de 2019 Archie, el primogénito de los duques de Sussex, el príncipe Enrique y Meghan.
La reina, de 94 años, y su marido, el duque de Edimburgo, de 99, así como el duque de York, padre de Eugenia, «han sido informados y están encantados con la noticia», indicó el palacio.
En su cuenta de Instagram, la princesa publicó una fotografía en blanco y negro en la que aparece una de las manos del bebé junto con las que parecen ser de su padre y su madre.
La hija de Andrés se casó en 2018 con Brooksbank en una ceremonia religiosa celebrada en la capilla de San Jorge del castillo de Windsor, tras haber conocido al empresario durante unas vacaciones de esquí en Suiza en 2010.
Fuente: EFE
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