Instagram es probablemente la red social más utilizada por los internautas para exhibir su faceta más glamurosa y, a veces, superficial.
Sin embargo, la modelo de tallas grandes y activista Robyn Lawley, que tiene 212.000 seguidores, decidió infringir esta ley no escrita para mostrar que su vida no es tan ideal como podría parecer.
La bloguera australiana ha aprovechado la plataforma para mostrar el efecto que dejan en su rostro las enfermedades que padece: el lupus y el síndrome fosfolipídico.
A raíz de estas enfermedades autoinmunitarias crónicas, la mujer sufre lesiones cutáneas y crisis convulsivas, entre otros síntomas. Hasta hace poco Robyn nunca había enseñado las huellas de la enfermedad a sus seguidores, pero el 24 de septiembre publicó varias fotos en la que aparece con una inflamación del tejido conectivo bajo su enrojecido ojo derecho, mencionando que acababa de tener un «ataque».
«A veces, las redes sociales pueden dar miedo, a veces no puedo soportarlas y otras veces me encantan, cuando personas pueden mostrar su verdadero yo», comenta.
A aquellos que sufren problemas semejantes, Robyn les transmitió el mensaje de que no están solos.
Sus seguidores valoraron la valentía de la modelo y publicaron un gran número de elogios y comentarios de apoyo.
«Estoy impresionada y orgullosa de ti», comentó una.
«Me alegra que lo hayas compartido», escribió otra internauta.
En 2018, Robyn publicó la foto de las heridas que sufrió al caerse por una escalera durante otro ataque de convulsiones. El accidente le dejó cicatrices en la frente, el labio y la barbilla.
Fuente: RT
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