Con el objetivo de apoyar a otras madres jóvenes, Prue Thomas ha compartido con el portal australiano MamaMia la sorprendente historia de su maternidad, cuando hace veinte años dio a luz sin saber que estaba embarazada.
En el año 2000, Prue Thomas tenía 19 años y estaba empleada en un hotel. Un día que estaba en el trabajo sintió un dolor en la espalda. “Al principio pensé que me había lastimado la espalda moviendo muebles”, explica.
“Me enviaron a casa antes de que terminara mi jornada laboral y poco después me empezó a doler mucho el abdomen y comenzó a expandirse […]. Tuve tanto dolor y estaba tan hinchada que mi hermana llamó a mi madre, que a su vez llamó a una ambulancia”, dijo.
Thomas pensó que el dolor se debía al síndrome del intestino irritable, que le habían diagnosticado con anterioridad.
Cuando la paciente estuvo en la sala de emergencias, el médico identificó rápidamente la verdadera causa de su padecimiento: estaba embarazada y había roto aguas.
Sorprendentemente para Thomas, durante todo el período de embarazo su peso no varió y la joven no experimentó ninguno de los síntomas característicos.
Seis horas después de sentir el dolor en la espalda, Thomas dio a luz a una niña sana a la que llamó Meghan. La mujer, que admite que no planeaba convertirse en madre tan pronto, le dio la inesperada noticia al padre, pero él no la creyó y cortó todo contacto con ella.
Veintiún años después de tener a Meghan, Prue asegura que aún se siente juzgada de vez en cuando.
“He tenido que demostrar una y otra vez que puedo hacer esto. He tenido y todavía tengo una gran carrera. También tengo una hija maravillosa, con la que he viajado por el mundo. No dejé que tener un niño a los 19 años ‘arruinara’ mi carrera o mi vida. Es posible que me haya tomado un poco más de tiempo de lograrlo, y tuve momentos difíciles cuando ella era más joven, pero pude manejar esta situación”, explica.
Publicar un comentario
Muchas gracias por escribirnos, verificaremos tu opinion que es muy util, para nosotros, Bendiciones.